Una Semana Santa diferente… una Semana Santa especial

Ha sido una Semana Santa atípica y especial. No por muy manido deja de ser cierto el término «Semana Santa diferente».

Para D. Jerónimo ha sido duro celebrar en soledad estos días pero a su vez, sentía que todo Fuente Álamo estaba dentro de la Iglesia de San Agustín espiritualmente. Tampoco ha sido la Semana Santa que los fuentealameros esperábamos, no hemos visto procesiones, no hemos olido a incienso, no hemos escuchado marchas. En el recuerdo queda la mañana del Domingo de Ramos en la ermita de San Roque, la Virgen Dolorosa acompañando al Cristo de la Misericordia o la peculiar procesión del Encuentro entre la Virgen del Rosario con su Hijo a través del Santísimo.

Desde el primer momento D. Jerónimo tuvo claro que esta semana tan especial para los cristianos había que celebrarla de manera especial y había que llevarla a todos los hogares, dentro de nuestras modestas posibilidades. Se han emitido en directo los actos y Oficios programados a través de Facebook y YouTube.

Esta Semana Santa de 2020 nos ha dejado imágenes históricas, como la bendición de las palmas desde la torre del campanario, la preciosa imagen de Ntro. Padre Jesús Nazareno presidiendo los Oficios de Miércoles Santo y Jueves Santo, los propósitos que diariamente ha enviado el párroco, la vela al Santísimo emitida en directo durante 12 horas o la Exaltación a nuestra patrona en la puerta del templo y la bendición a la Villa con el Santísimo.

VIERNES DE DOLORES.
En la antesala de la Semana Santa se trasladó la Dolorosa, de estilo Salzillesco, presidiendo las celebraciones.

DOMINGO DE RAMOS. Se celebra la entrada de Jesús a Jerusalén en medio de una multitud que lo aclama como Hijo De Dios.
A las 12h se realizó la bendición de las palmas desde la torre, mientras tocaban las campanas el himno a San Agustín. Fueron muchas las familias que hicieron su propia palma de papel tal y como les propuso el párroco.

LUNES SANTO. Jesús se encuentra el templo convertido en un mercado. Por la tarde vuelve a Betania donde cena en casa de Lázaro y María unge los pies a Jesús.
Comenzó D. Jerónimo a enviar un propósito diario a todos los niños y a todas las familias, ese día fue «optar por el bien» y por la tarde hubo meditación y oración antes de la Eucaristía.

MARTES SANTO. Jesús vuelve a Jerusalén y pasa todo el día predicando su doctrina. Al atardecer regresa a Betania y se reúne con sus discípulos. Les anticipa que uno de ellos lo va a traicionar, también predice las negaciones a Pedro.
Hubo de nuevo Meditación y Oración antes de la Eucaristía y el propósito de este día fue «hacernos amigos de Jesús, perdonando».

MIÉRCOLES SANTO. Reunión en el sanedrín para condenar a Jesús.
Jesús permanece en Betania con sus apóstoles en casa de Lázaro, Marta y María.
Judas va a Jerusalén a comprar el cordero para la cena del jueves y aprovecha esta salida para organizar con los sacerdotes la traición a Jesús.

Este día que marca el final de la Cuaresma y el inicio de la Pascua, fue trasladado Ntro. Padre Jesús Nazareno a la Capilla del Rosario y el propósito que se publicó fue «ayudar de los demás».

JUEVES SANTO. Primer día del Tríduo Pascual. Por la tarde sube a Jerusalén, lava los pies de sus discípulos y celebra la última cena. Tras la cena se dirigen todos hacia el huerto de Getsemaní donde Jesús se retira a meditar.
Allí Judas le traiciona con un beso en la mejilla. Jesús es capturado y entregado al sanedrín donde es juzgado toda la noche.

Dirigió nuestro párroco un mensaje a los feligreses con motivo del Triduo Pascual y los Oficios de la Cena del Señor se adaptaron a las circunstancias, omitiendo el lavatorio de los pies.
Durante la celebración se cantó el «Gloria» de manera solemne mientras volteaban las campanas y tras los Oficios quedó expuesto de manera solemne el monumento para su adoración.

VIERNES SANTO. Se recuerda la Pasión del Nazareno. Los interrogatorios de Herodes y Pilato, la flagelación, la coronación de espinas y la crucifixión.
Poncio Pilato está en contra de crucificar a Jesús y ordena una pena menor, la flagelación. Los judíos no quedan satisfechos con este castigo y es obligado a crucificarlo.
Jesús carga con la cruz por las calles de Jerusalén y es crucificado en el Golgota.
A las 3 de la tarde, justo antes de morir, Jesús gritó «Dios mío, Dios mío, ¿Por que me has abandonado?»

Este día no se celebra Eucaristía, pero sí una celebración litúrgica de la Muerte del Señor que concluye con la adoración de la Cruz. Los Oficios comenzaron con un rito propio de este día, el sacerdote se postra como símbolo de humillación del hombre terreno y del dolor de la Iglesia.

SÁBADO SANTO. El cuerpo de Jesús permanece en el sepulcro, custodiado por soldados romanos. La comunidad cristiana vela junto al sepulcro.
El sábado tuvo lugar la solemne Vigilia Pascual en la que se conmemora la Resurrección de Jesucristo.
Este año también se suprimió el fuego pascual. Al inicio de la vigilia se encendió el cirio, se proclamó la Resurrección y se recitó el Pregón Pascual.

DOMINGO DE RESURRECCIÓN. Jesús ha resucitado.
Cuando María Magdalena y la otra María fueron al sepulcro se lo encontraron vacío. Un ángel habló a las mujeres: «Vosotras no temáis, ya sé que buscáis a Jesús Crucificado. No está aquí: ha resucitado»

El domingo tuvo lugar un austero pero muy simbólico acto de exaltación a nuestra querida patrona la Virgen del Rosario. Colocada en una peana ante la entrada del templo, recibió el canto de la Salve y las oraciones de D. Jerónimo.

A continuación realizó la bendición al pueblo de Fuente Álamo con el Santísimo y a las 12 se celebró la solemne Eucaristía de Pascua con una homilía para el recuerdo que se publicará más adelante.

Al finalizar la misa y como broche final de esta Semana Santa, se emitió el último propósito de la semana que era cantar a la Virgen del Rosario y a Jesús la canción «No tengo miedo».

Por último, D. Jerónimo quiere agradecer las continuas muestras de cariño que ha recibido a diario, durante esta semana, por parte de su querido pueblo de Fuente Álamo.

Juan Morales