Solemne Misa del Gallo

En la Misa de Nochebuena, más conocida como Misa del Gallo, celebramos el nacimiento del Salvador

A medianoche tuvo lugar el nacimiento de Dios hecho hombre y se conmemoró con la segunda celebración más importante del año litúrgico. Es inevitable pensar en el paralelismo que hay entre la Vigilia Pascual de la noche santa y esta celebración del «resplandor de la luz verdadera».

Este año para celebrar la Navidad se ha instalado un precioso altar efímero en el que vemos al Niño Jesús entre la Virgen María del Rosario y San José, y todo el nacimiento de estilo barroco se encuentra rodeado de guirnaldas y flores que elevan nuestro espíritu al cielo.

Este año la Misa del Gallo fue una ceremonia doblemente emotiva, porque al inicio de la misma fue bendecida la nueva imagen de San José que ha realizado para la parroquia el escultor Ramón Cuenca. Una excelente imagen de vestir que porta vara y diadema que ha regalado personalmente el párroco D. Jerónimo Hernández.

Tras la bendición de San José, sonó el canto del «Gloria» con el que se hizo la luz mientras caía el velo que cubría al Niño Jesús y las campanas repicaban anunciando al mundo la buena nueva.

Durante la homilía D. Jerónimo hizo alusión a la importancia de los pastores en aquel suceso que marcaría la historia de la humanidad y tuvo palabras de recuerdo para todos aquellos familiares y amigos que ya no están entre nosotros y que aunque no se sientan esta noche con nosotros, si que se reúnen en torno a la mesa celestial.